La Democracia en México

La Democracia en México

Se dice que hay un desencanto por la Democracia en México y se nos compara con otros países de la región cuyo nivel de desarrollo y especialidad productiva no es la nuestra. Hay que recordar a Florestan Fernández quien afirmó que la singularidad de México se basaba en su liberalismo. Si se consulta la Legislación Electoral Mexicana 1812–1988 editada en México hacia 1973 y publicada otra vez 5 años después por la Gaceta Informativa de la Reforma Política de la Comisión Federal Electoral se observarán los esfuerzos hechos en México y el voto desde el 19 de marzo de 1812 en la Constitución Política de la Monarquía Española.

También contamos con dos amplísimos estudios por: José Antonio Aguilar Rivera y Luis Medina Peña, que abarcan noventa años de extensos y variados estudios sobre el sufragio. El primero titulado: Las elecciones y el gobierno representativo en México (1810-1910) y el segundo: El siglo del sufragio. De la Revolución a la Alternancia.

En estos encontramos las diferentes clases de voto que ha habido desde el censitario hasta la del 19 de diciembre de 1911 promulgada el 22 de mayo de 1912 por Francisco I. Madero y firmada con el Lema: “Libertad y Constitución” en mayo de 1912 y por Jesús Flores Magón, Secretario y Encargado del Despacho de Gobernación, otorgando el voto universal. Como es sabido, éste trae consigo la aparición de Partidos Políticos. De entonces a 1929, una serie de vicisitudes que dieron como resultado la aparición del Partido de la Revolución Mexicana y sus distintas variantes lo que en 1946 se denominó Partido Revolucionario Institucional, PRI de entonces a la fecha.

Definido por Giovanni Sartori como un partido hegemónico en sistema no competitivo, y comparado con Polonia; en su libro: Partidos y sistemas de Partidos lo anterior será replanteado por T.J. Pempel en su libro: Democracias diferentes: Los Regímenes con un partido dominante. Según esta definición nuestro país se compara con Chile.

En 1977 y después de no haber habido candidato de oposición en las elecciones de 1976, se inicia el proceso de una reforma política que dará como resultado una variedad de partidos y al ejercicio competitivo del voto ciudadano por parte de diferentes Partidos Políticos. Según la Reforma de Jesús Reyes Heroles y para mí, su intención es sustituir a los hombres fuertes por éstos.

Efectivamente como señalan diferentes y variados estudiosos entre los que destaca el libro de Rogelio Hernández Rodríguez: Presidencialismo y hombres fuertes en México. La sucesión presidencial de 1958. Fué un proceso en el que se había logrado subordinar a los caciques. Sin embargo, la Reforma Política de 1977 tuvo resistencias por algunos como es el caso de Rubén Figueroa, Gobernador de Guerrero.

Regresando al tema que me ocupa la democracia en México es un hecho como lo explicó Pablo González Casanova en 1967. De entonces a la fecha sus avatares están mercados por la identidad misma de los Partidos Políticos advertidas por Ostrogorsky y Michels respectivamente: los partidos son entidades autoritarias con leyes propias y de hierro infranqueables por eso el primero propone ligas con causas específicas. Ciertamente ha habido un desencanto por la Democracia puesto que los partidos políticos se han visto sometidos a críticas recientes que hablan de la pérdida de su importancia debido a su incapacidad para dar respuesta a los desafíos derivados de nuevas demandas y actitudes de las sociedades democráticas contemporáneas. Algunas de esas críticas sostienen que los partidos políticos siguen cumpliendo funciones básicas para la democracia. En el caso de México permite confirmar esta postura por medio del análisis del problema, cómo se observa durante su proceso de democratización, en que se han vivido experiencias inéditas como elecciones que se deciden por unos pocos miles de votos, como ocurrió en la elección presidencial de 2006.

En la elección de 2012 donde el PRI recuperó el Ejecutivo Federal con el 38.20% de los votos de una participación de 50,323,153 votantes.

En la actualidad existen candidaturas independientes desde 2012 y se presenta una amplia variedad de candidaturas que sin embargo satisfacen las demandas de la sociedad hacia el desencanto de los partidos políticos. Lo anterior pudiera dispersar el voto y hacer más difícil el proceso electoral.

En enero de 2018 y una vez iniciado el proceso electoral las campañas políticas se ven desarticuladas y sorprende el registro de ciudadanos listos para votar dado por el INE de una afluencia diaria de cien mil ciudadanos preparándose para votar. El próximo primero de julio al parecer tendrá una gran participación y será un día importante para la ciudadanía que demostrara su deseo de decidir por quien será gobernada. Este ejercicio ciudadano demostrará si hay o no escepticismo al disputar los cargos públicos.

En esta situación el proceso se ha visto empañado por el atentado en contra de Marichuy Patricio, quien representa una causa específica y ha sufrido el domingo 21 de enero un ataque a su caravana condenable y deleznable.